Ninette y un señor de Murcia, Madrid

Obra teatral divertida y entretenida para echarse unas risas, aunque un poco pasada de moda y poco acorde con los tiempos actuales. Quizás habría que guardarla en el armario para otros tiempos.

La sala grande del Fernán Gómez (la sala Guirau) es enorme y muy ancha; nos dieron entradas muy laterales pero aún así lo vimos decentemente en las cómodas butacas de cuero. La obra como todas las de Mihura es de personajes rocambolescos y humor un poco absurdo, con muchas referencias a los españoles y los franceses. Los actores estuvieron bien y nos reímos a gusto.

Los actores magníficos, la puesta en escena sencilla pero atrayente. La obra casi se hace corta porque te hace formar parte de ella desde el primer momento. Muy recomendable!

Es una gran opción para pasar una tarde

Buena escenografía, simple y muy bien definida, respetando la obra original de Mihura, con la suficiente viveza para que el rato sea apreciado y continuante para los que conformamos el público.

Pasas un rato agradable aunque en algunos momentos no se entiende a ninette y a la madre.en general buena interpretación aunque los decorados dejan mucho que desear

Mihura es oro puro. Soy lo bastante mayor para conocer esta obra con otros actores. Los actuales son de sobra conocidos y muy buenos. Todos.

Lo pasamos muy bien, ya la conocíamos pero fue como verla por primera vez, nos divertimos mucho. La recomiendo para pasar una buena tarde. Los actores me encantaron, están todos geniales, hasta en la mímica, nos partimos de la risa, son muy buenos.

en términos generales buena. El teatro Fernan Gomez cuenta con una visibilidad buena, en las tres almendras centrales de la ubicación de las butacas. Las butacas son anchas y tienen espacio entre una fila y otra para poder mover las piernas.

Perfecta en ejecución y muy entretenida. La sala muy espaciosa y los asientos muy cómodos aunque poco espacio para los pies entre tu butaca y la de delante. Nos gustó mucho y volveríamos a repetir.