04/08/2017
Guillermo Lopez Rodriguez le da un
7.1
"Calidad y precio."
Está muy bien teniendo en cuenta la relación entre lo que pagas y lo que obtienes.
¿Cuál fue la razón principal para escoger este hotel? Precio, ubicación, calidad, equipamiento?
Calidad-precio.
¿Cuál fue el principal motivo de tu reserva, negocio o placer?
Placer.
Positivo:
El hotel se encuentra al lado de todos los servicios (parada de bus, taxis, alquiler de coches, estanco, farmacia, etc) y a 5 minutos de la playa del Arenal, en la que el agua está limpia y con poca profundidad hasta que llegas bastante dentro y tiene servicio de hamacas y actividades acuáticas.
Pudimos hacer el check-in a las 10:00 horas y el día que salíamos, a pesar de tener que dejar la habitación a las 12:00 horas, pudimos comer en el hotel ya que teníamos el todo incluido. Tienen servicio de guardamaletas.
La comida, a pesar de no haber muchísima variedad, estaba muy buena, era bastante casera y reponían de todo. Además, los horarios del desayuno, comida y cena eran muy amplios (8-10 horas, 13-15 horas y 19-22horas).
La habitación estaba limpia y el personal es amable e incluso el socorrista de la piscina. Nos facilitaron almohadas extra sin problemas. El personal de seguridad que se encargaba de hacer cumplir las normas de decoro y descanso cosa que es bastante importante en esta zona de Mallorca.
Negativo:
La terraza, a pesar de dar a la piscina, estaba muy pegada a las de las habitaciones de al lado y el suelo estaba bastante sucio.
La tv de la habitación era como mucho de 17 pulgadas. La piscina es más pequeña de lo que parece y en ocasiones era bastante agobiante dado el alto número de personas. Hay un número ínfimo de hamacas. El todo incluido era sólo bebida, de marcas absolutamente desconocidas, y los refrescos eran de máquina y en vaso pequeño de plástico. En las cenas, las camareras tenían muchísima prisa por terminar y recogían las mesas sin ningún cuidado (varios platos y vasos rotos o caídos encima de clientes) y antes de tiempo (en dos ocasiones nos quitaron los platos y vasos al levantarnos a por más comida sin haber terminado de cenar). El jefe de sala no controlaba esto a pesar de las quejas que recibía.