14/08/2019
Pablo Jesús le da un
3.9
"No es un 4 estrellas, es un 3 estrellas muy corriente."
Mi valoración es en base a la categoría que tiene el hotel y el precio. Es decir, que en un 3 estrellas no haría esta valoración, pero es un 4 estrellas y evidentemente no se puede engañar con una categoría ni aprovecharse de la misma, sobre todo con gente mayor que allí va a tomar las aguas. Es muy difícil que yo no recomiende un hotel, pero en esta ocasión engañaría si lo hiciera. En este sentido no voy a valorar el balneario, sino el hotel en comparación con cuantos he utilizado de 4 estrellas y de 3 estrellas que merecen la 4ª. Vamos a empezar por la recepción, llegamos y los recepcionistas te reciben sentados (no se levantan, es curioso). Es cierto que llegamos temprano por un cálculo defectuoso en el tiempo de camino, nos dan la habitación (es cierto que no tenían el por qué de dárnosla), si bien como en la mayoría de los hoteles si está hecha te la dan. Nuestra sorpresa al llegar a la misma es que estaba sin hacer tal y como la había dejado el cliente anterior. Vamos a la recepción a decirlo y en vez de disculparse aparece por allí una señora que le sienta malamente que se lo digamos y responde “es que las habitaciones no se dan antes de las 1.” Bueno nos fuimos a pasear a Lanjarón y cuando volvimos un poco antes de las 1 nos la dieron porque preguntamos (no porque nos llamaran al móvil para decirnos que la tenían como ocurre en la mayoría de los hoteles de 4 estrellas). Para llegar a la habitación desde la recepción hay un paseo, pues el hotel bordea todo el edificio del balneario y necesitabas coger 2 ascensores y varios pasillos. La habitación pequeña, habíamos contratado una triple y nos dieron doble con supletoria (es igual en ese sentido). Las habitaciones están peladas, por ejemplo, no hay minibar, sólo caja fuerte. El baño muy incompleto en amenities, tienes allí una pegatina que dice que si las quieres las pidas en recepción (eso no es así, cuando uno va a un 4 estrellas tienes desde champú y gel hasta maquinilla de afeitar, cepillos de dientes…), sólo dos dispensadores de jabón de esos que no diferencian gel de champú; tampoco tiene una distribución en el baño para poder colgar el bañador o toallas mojadas más de las justas. La piscina, sí es una preciosidad, además de agua salada, ahora bien, para llegar a ella hay que subir tres cuestas (en un día de temperatura normal perfecto, en uno de calor hay que pensárselo). Respecto al desayuno, el comedor es muy corriente y es un buffet muy corto y no muy saludable, el zumo es de bote y la bollería en la que hay poco que elegir altamente industrial (recuerdo el precio del hotel, ese desayuno es ideal para un hotel de 2 estrellas). De decoración en general es escaso. A la hora de marchar clientes haciendo cola para entregar las tarjetas porque te revisan uno por uno no vaya a ser que te hayas dejado algo sin pagar y sentados. La despedida fue, después de dos señoras que teníamos delante con el mismo problema: “Todo correcto, ya puede usted entregarme las llaves”. Creo que son muchos detalles que no están en acorde con la categoría, cuando uno va a un 4 estrellas y paga por él se espera otra cosa. En resumen, mucho nombre, pero nada más y a mi juicio se lucran mucho para las personas mayores que allí van por necesidad y que en muchas ocasiones no deben de conocer como son las prestaciones de un 4 estrellas en general.
¿Cuál fue la razón principal para escoger este hotel? Precio, ubicación, calidad, equipamiento?
Ubicación y categoría.
¿Cuál fue el principal motivo de tu reserva, negocio o placer?
Placer, visitar Lanjarón y las Alpujarras.
Positivo:
La piscina de agua salada y que alrededor más o menos se puede aparcar.
Negativo:
Trato de recepción, habitación, baños, desayuno...